Cómo evitar que se congele la bombona de gas al cocinar una paella
Uno de los fenómenos más curiosos y peligrosos para la preparación de nuestra paella es acabar con un regulador congelado o boquilla congelada (por donde sale el gas, para ser más específicos).
Es un fenómeno con muy bajas probabilidades de que suceda pero que, sin duda, arruinará por completo nuestra paella si el gas decide dejar de salir en el momento más crucial en la preparación de nuestra paella, cuando introducimos el agua y el arroz.
Pero, ¿por qué sucede esto? ¿Qué debería hacer para evitarlo? En este tutorial te vamos a explicar por qué se congelan las botellas de butano y cómo evitarlo.
¿POR QUÉ SE CONGELA MI BOTELLA DE GAS?
BAJAS TEMPERATURAS
Para empezar, vamos a dejar clara una cosa: la temperatura de ebullición del butano es de -0.5°C, o 0 grados, para redondear. Esto quiere decir que en temperaturas demasiado bajas nuestras botellas de gas dejarán de funcionar correctamente, ya que el butano, al hacerse gas, baja su presión, dificultando la salida de gas.
Ahora, dudo mucho que vayáis a hacer una paella a menos de 0 grados, asi pues, ¿cómo se puede congelar la boquilla de mi botella cuando estamos a una temperatura cálida (o extremadamente cálida si estamos en verano)?
Pues espero que estéis atentos porque es momento de una breve clase de física.
EL EFECTO JOULE-THOMSON
¿Aún seguís aquí? Pensaba que ya nadie se interesaba por la física. James Prescott Joule fue el responsable de investigar y escribir acerca de este fenómeno. Este efecto describe el cambio de temperatura que sufre un gas cuando se expande a través de una válvula o una abertura estrecha sin realizar trabajo y sin intercambio de calor con el entorno. No os asustéis, ahora lo traduzco.
Cuando el gas, butano en este caso, es presionado a salir por una boquilla estrecha, se comprime. Esto provoca que, al volverse a expandir en una atmósfera ambiente (o sea, cuando sale fuera de la botella), salga a una temperatura menor a la que estaba dentro del envase. ¿Sabéis cuando os ponéis desodorante en spray y está frío? Pues es por esto. Estas temperaturas pueden llegar a ser considerablemente frías.
Entonces, ¿cómo afecta esto a la salida de gas? Muy simple, si bien el butano no se congela cuando sale, da igual la potencia que tenga, sí puede enfriar la humedad del ambiente, haciendo que el agua de la humedad se condense y moje la boquilla de la botella. Ahora solo queda atar cabos, a ver si habéis estado atentos.
El butano sale presionado de la botella pasando de estado líquido a estado gaseoso. A ver si recordáis qué temperatura necesita el butano para hacerse gas (no vale subir).
Eso es, cuando el gas butano sale de la botella, la temperatura disminuye momentáneamente, pudiendo llegar hasta los 0 grados incluso superándolos dependiendo de la potencia. ¿Y qué temperatura necesita el agua para congelarse? Pues eso, ya sabéis por qué se congela el regulador cuando usamos mucha potencia.
Para quien se haya perdido, el agua que se condensa sobre la boquilla se termina congelando debido al frío que produce el butano al salir. En definitiva, este es un fenómeno considerablemente extraño y poco probable de que se suceda, pero no es imposible, así que vamos a ver una serie de medidas para evitarlo.
CÓMO EVITAR QUE SE CONGELE LA BOTELLA DE GAS
BAJAR LA POTENCIA A LA SALIDA DE GAS
Bueno, supongo que todos sabemos que, aunque los coches puedan ir a más de 200 km/h, no es motivo para saltarnos las normas de circulación. Pues bueno, aquí es igual. Antes de poner el gas a toda potencia, debemos ser conocedores del ambiente y de su potencia máxima para evitar que se dé el efecto Joule-Thomson.
Si tu salida de gas o regulador permite más potencia de la que necesitas, no te pases y déjala a un nivel moderado. Es mejor que tarde un poco en calentarse lo que vayas a poner que quedarte sin gas por haberte excedido.
PRECALENTAR EL GAS
Otra opción bastante útil, sobre todo en ambientes fríos, es usar un precalentador de gas, una manguera calefactora o un cubrebotellas que mantendrá caliente nuestra botella de butano. Con estos útiles aparatos seremos capaces de mantener el gas a una temperatura adecuada o , en casos de frio extremo, calentar el gas que sale para evitar que llegue a congelar nuestra boquilla.
Usar el cubrebotellas a menos de 0 grados no solo evitará que se congele nuestra boquilla, sino que también evitará que el butano líquido que se encuentra dentro de la botella se convierta en gas, evitando así una mala combustión.
BUSCAR AMBIENTES ADECUADOS
Tranquilos, no tendréis que iros al monte en medio del verano ni buscar el lugar más seco que exista. Ya sabemos que tanto la humedad como el frío contribuyen a que se nos congele la boquilla, por lo que los mejores lugares para cocinar nuestra paella serían:
- Al aire libre, en un ambiente templado: Aunque haga mucha humedad, si no pones la potencia al máximo, no debería haber mayor problema ya que las temperaturas del butano no caerán lo suficiente como para que se congele.
- En casa, en un espacio bien ventilado y que no sufra de mucha humedad.
- En un ambiente frío: Asegúrate de hacerlo en un interior donde se pueda tener controlada la temperatura. Lo ideal sería que esté por encima de los 10°C.
REVISAR FRECUENTEMENTE EL EQUIPO
Si bien la congelación es la causa principal de que se tapone nuestra boquilla, también pueden haber restos de suciedad o basura que se hayan acumulado por la falta de uso.
Esto puede influir considerablemente, ya que afecta al flujo de gas que sale de la botella. En caso de que se den las condiciones necesarias, la congelación se producirá más rápido o directamente no tendremos la potencia suficiente para tener una llama decente.
USA UNA SEGUNDA BOMBONA DE GAS
Este ultimo consejo no es aplicable si usamos quemadores pequeños, pero para aquellos paelleros de gran tamaño, conectar una segunda bombona puede ser no solo una buena solucion a este posible problema, tambien nos sirve ademas para proporcionar la posible potencia extra necesaria para realizar nuestra paella.
La razon de dar uso a esta tecnica se debe a que, al usar dos bombonas, la potencia necesaria para nuestro quemador es repartido entre ambas, lo que disminuye en su conjunto la salida de gas necesaria de las dos botellas de gas. Menos fuerza de salida entre ambas pero similar potencia, menos probabilidades de que la salida del gas congele nuestra boquilla.
Y ya está, eso es todo lo que os podemos decir sobre el tema. No somos físicos expertos, pero sí tenemos algo de experiencia con las paellas (a algunos de nosotros sí que se nos ha congelado alguna vez...). Si sabéis de algún otro método para evitar que se congele o queréis añadir algo de información extra, sed libres de dejar algún comentario.